EN 2019
GESTIONAMOS
PROYECTOS
ALCANZAMOS A
PERSONAS
Donde más de la mitad de los hogares (54%) experimentaba antes de la COVID19 algún grado de inseguridad alimentaria, el 87% de los pequeños productores agrícolas ha experimentado un impacto severo sobre su capacidad de producir alimentos debido al aumento de los costes de producción.
Seguimos aumentando nuestra capacidad de cobertura en el país para llegar a los más desfavorecidos y desarrollar soluciones duraderas.
Más de la mitad de los hogares están teniendo dificultades para acceder a alimentos, 2,6 millones de personas se encuentran en situación de crisis alimentaria (IPC fase 3) y 3,2 millones en inseguridad alimentaria (IPC fase 2).
Seguiremos dando respuesta a las necesidades de los hogares más vulnerables a través de asistencia alimentaria y tratando de impulsar políticas de protección social que puedan dar respuesta a las crisis recurrentes de la zona.
Donde la inseguridad intermedia y grave afecta una parte importante de la población rural e indígena, se prevé que la pobreza aumentará a 29.5%, siendo los hogares no pobres pertenecientes a la clase media los más afectados (clase media podría reducirse de 40.7% a 34.2%).
Escalamos nuestras intervenciones en anemia y desnutrición crónica y formamos a personas en riesgo de exclusión social para promocionarl el empleo y el emprendimiento.